03 marzo 2003

La vía del guerrero

Me gustan los espíritus fuertes, los luchadores que ponen sus emociones en obra, aquellos que son capaces de cometer errores, corregir y continuar. Los que son capaces de autoconstruirse a pesar de todo y de todos.

No es admiración, es profundo respeto. No es una relación de poder, cada uno en su espacio propio y a veces, solo a veces, levantando murallas de defensa contra la ferocidad de tanta mediocridad. ¿Vencer? Eso no importa: Hacer

Al hilo de los recientes acontecimientos, de los infinitos posibles, van y cierran un diario y se levantan voces airadas. Todos los argumentos válidos, pues es libre opinar, pero detrás de todo este circo mediático y judicial se ocultan otros hechos (de los muchos posibles) : Cultura Subvencionada. Da igual que sea en España o en Euskadi, o un poco más allá, en la luna lunera cascabelera.

Una pléyade de expertos repartiendo el misérrimo presupuesto destinado a cultura. Mejor: Cultura. A la puerta de la Iglesia, o Templo del Arte vemos al Ministro tirando caramelos a los niños. Y los niños se los reparten a hostia limpia. Que contento está el Ministro, que imagen tan entrañable, como aprenden los niños: La vida es dura.

!Qué ricos los caramelos de la Ministra de Cultura!

¿Qué es la cultura para estos caraduras? ¿Qué es Arte? ¿A cuánto me vendes el pescao marinerito bonito?

El caso de Pablo Aizoiala no es único, hay más ejemplos, pero si consideramos la feria de Arco, u otros parámetros más o menos clásicos, como indicador de la calidad de un artista, de Pablo cabe decir al menos hoy: Es Pintor, eso como poco y ya sería suficiente.

Al menos cinco años consecutivos representado en esta Feria y ni una sola reseña en periódico Vasco alguno. Ni diarios a la izquierda, ni diarios a la derecha, ni diarios patrioteros o abertzales ni diarios abertzales o patrioteros. Pero si van publicitados galeristas representando a artista subvencionado, artistas con propuestas y trabajos perfectamente válidos pero ...

Subvencionados y muy críticos con el sistema y con el Estado y con la madre que los parió y con la ... o sea, como muy modernos, y copiones de imagen de revista de vanguardia y una onza de Internet, o aún menos: Protocolo http o tecnología web, ni una ínfima parte de la internet a la que llaman NetArt, angelitos, ni siquiera conocen la herramienta con la que trabajan.

El caso de Pablo es extraño, su obra tiene un valor por sí misma, no necesita un folleto explicativo, no requiere subvención a un oscuro comisario para que nos explique (intentando convencer o engañar) cuán importante es el artista.

La obra de Pablo se sujeta a sí misma, lo dice todo en el plano y limite de una tela. Tal vez este sea el problema, no necesita ni unos ni a otros. Si ustedes ven uno de sus cuadros, consideren que: se encuentran delante de un guerrero ferocísimo que construye mundos delicados. O sea Un Pintor.

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